La investigación aborda un entorno global universitario en el cual la creatividad, de una parte, se potencia por el arte y el juego, y de otra se somete, la innovación, la productividad económica y el mercadeo, entre otros, que modifican la realidad educativa. Como conclusión principal se argumentó que el pensamiento se desarrolla en relación con el tipo de sociedad de la cual emerge, y en el aula universitaria emana de la creatividad.